sábado, noviembre 20, 2010


No arremetas contra mi paz,
aunque zurcida,
me sirve.
Puedo cantar, hablar,
y a veces,
incluso soñar.
Pero si avanzas,
me destruyes.
Lo sabes.
El amor es respeto.
No vendas sucedáneos
a quién vio
lo que es.
Dices conocer
pero nunca supiste.
Yo si.
Yo sé.
Por eso mis uñas,
mis dientes,
mis raíces y mis garfios.
Todos en pié,
siguiendo tus pasos.
Si quisieras
te daría una flor,
de miel, de calor,
de dulce ternura.
Pero no sabes.
Y yo si sé.
Defenderme.

7 comentarios:

  1. Lo dejaste clarito. Q no se repita

    ResponderEliminar
  2. el comentario anterior es mío

    ResponderEliminar
  3. Anónimo7:31 p. m.

    Je je je. Abajo los prejuicios. Arriba las mujeres fuertes e inteligentes.

    Buen fin de semana.

    Un saludo

    ResponderEliminar
  4. Qué bueno...y el dibujo, genial!!! El texto, mejor.

    ResponderEliminar
  5. Es cierto, lo has dejado muy claro. Bien hecho. Las personas que no saben pueden llegar a ser unos auténticos manazas con los corazones.

    Un abrazo.

    ResponderEliminar
  6. Hermosa defensa la de tus palabras-
    No te hace falta nada más para decir ¡BASTA.
    Sólo poesía-
    Un abrazo

    ResponderEliminar
  7. Claro y hermoso.
    Que no te hagan daño.

    Saludos.

    ResponderEliminar